
Compañías estatales de China compraron ayer lunes mínimo tres cargas de semillas de soja a Estados Unidos, según Reuters, a pesar de que distintos medios recogieron que el Gobierno del gigante asiático había ordenado suspender compras de distintos productos agrícolas al país norteamericano (entre ellos, la soja).
En concreto, Pekín compró ayer al menos 180.000 toneladas para recibirlas en octubre o noviembre, meses en los que la soja estadounidense suele ser la más barata del mundo, tal y como han trasladado tres operadores norteamericanos a la agencia de noticias británica.
Bloomberg avanzó ayer que el Gobierno de China había ordenado detener compras de distintos productos agrícolas a EEUU después de que el presidente norteamericano, Donald Trump, anunciara que tomará las medidas necesarias para retirar a la ciudad de Hong Kong su estatus especial.
Entre otras cosas, se cancelaron envíos de entre 10.000 y 20.000 toneladas de carne de cerdo estadounidense, que equivalen a los pedidos hechos aproximadamente en una semana en los últimos meses.
Con esta represalia, la potencia asiática dejó en el aire el acuerdo comercial que ambas naciones firmaron en enero y con el que China se comprometió a elevar sus importaciones agrícolas desde Estados Unidos en 32.000 millones de dólares en los dos próximos años.
Según recoge hoy Reuters, pese a las compras hechas ayer, las compañías estatales importadoras chinas aún no han cubierto una gran parte de las necesidades de soja de octubre y noviembre.
"Es raro, realmente difícil de explicar", ha dicho una de las fuentes a la agencia de noticias inglesa. "Tal vez quisieron bajar el precio unos centavos, o tal vez hay otra agenda. Realmente necesitan las semillas [de soja]", ha añadido.